El Servicio de Hematología de Hospitales Universitarios Virgen del Rocío, que dirige el doctor Álvaro Urbano Ispizua, celebra estos días los buenos resultados obtenidos en el programa de trasplantes de progenitores hematopoyéticos, conocidos entre la población como trasplantes de médula ósea. De los centros autorizados para este tipo de intervenciones en Europa, el hospital se sitúa entre los primeros en número de trasplantes, con 73 realizados en los últimos doce meses, un 46% más que en los doce meses anteriores. Este volumen destaca asimismo por su complejidad, al haberse duplicado el número de trasplantes alogénicos (cuando el donante no es el propio paciente).
Del total de 73 trasplantes registrados, 40 han sido autólogos (médula ósea del propio paciente) y 33 han sido alogénicos (médula ósea de hermano o de donante no emparentado). Se garantizan por tanto los estándares de excelencia internacionales, que recomiendan que los centros autorizados realicen en semejante proporción trasplantes autólogos y alogénicos. Los alogénicos de donante no emparentado son los que entrañan una mayor dificultad, ya que cualquier incompatibilidad entre antígenos menores provocaría el rechazo. No obstante, es este el tipo de trasplantes que el hospital sevillano ha impulsado en aras de dar el mejor tratamiento a los pacientes que no hubieran alcanzado la curación con la quimioterapia convencional.
Se ha logrado alcanzar las 15 intervenciones (7 en adultos y 8 en pacientes pediátricos), frente a las 5 de 2007 (3 en adultos y 2 en pacientes pediátricos). Leucemias en adultos y patologías congénitas e inmunodeficiencias en niños han sido las enfermedades tratadas en mayor proporción. Las garantías de éxito han permitido aumentar la edad de inclusión del receptor, pasando de los 55 a los 65 años. Igualmente, subrayar que la sangre de cordón umbilical ha sido la fuente de los progenitores hematopoyéticos empleados en todos los casos pediátricos.